Este lugar me va perfecto, ofrece todo lo que necesito, wi-fi, aparcamiento gratis y un personal increíble. Recuerdo que en mi primera estancia me ayudaron con consejos sobre divisas. ¡No olvides probar los bizcochos caseros! Volveré en navidad.

Las vistas desde la habitación son realmente impresionantes, haciendo que cada amanecer sea una experiencia única y memorable. El desayuno ofrece una variedad que incluye deliciosos bizcochos caseros, digno de ser probados.

La limpieza de la habitación fue justita, sin llegar a estar impecable. La elección de cortinas en el baño genera incomodidad, y es decepcionante que al pagar 140 euros por noche se acepten esos detalles. También, las almohadas poseen un olor poco agradable que realmente necesita atención.

No olvides pedir recomendaciones de bizcochos caseros, ¡son una delicia!

Desayuno casero con vistas espectaculares

Las vistas desde mi habitación eran impresionantes, y cada mañana despertaba con la brisa marina y el olor a bizcochos recién horneados. El trato del personal es realmente excepcional, siempre dispuestos a ayudar y ofrecer recomendaciones. Además, el autobús para acceder a la ciudad está justo enfrente, lo que hace que moverse sea muy fácil.

Lo único que podría mejorar son las almohadas, que eran un poco bajas para mi gusto. Además, me hubiese gustado que la habitación tuviera una neverita, ya que sería útil para guardar algunas bebidas.

Las vistas desde la habitación eran espectaculares, pero el ruido del pasillo era molesto.

Las habitaciones son amplias y cómodas, y la conexión con el transporte público es excelente.

me sentí muy relajado, no he tenido ningún inconveniente

Familia feliz en un lugar tranquilísimo

El lugar es super tranquilo y precioso. Todo el hotel está impecablemente limpio.

No fue barato, pero estaba dentro de lo aceptable.

maravilloso hotel con vistas espectaculares y parking gratis para disfrutar de san sebastián

La atención del personal es increíble, siempre dispuestos a ayudar. Las vistas desde las habitaciones son absolutas maravillas. El desayuno casero fue un deleite inmenso.

disfruté de un fin de semana romántico en san sebastián. el hotel fue una joya, especialmente la atención de iñaki, quien nos dio excelentes consejos para explorar la zona. además, el desayuno con vistas al mar fue un momento inolvidable.

no había aire acondicionado disponible.

Pasé una noche y disfruté de las vistas al mar desde mi habitación. El desayuno fue variado y excelente, especialmente los bizcochos caseros. La atención del personal fue inmejorable, siempre listos para ayudar. Además, el acceso al autobús es muy práctico para visitar la ciudad. ¡Una experiencia memorable! 🌊

Las vistas desde el hotel son espectaculares y el acceso al transporte público es súper fácil, ¡ni siquiera tuve que jugar a buscar aparcamiento!

Lo único que me molestó fue el vidrio de la terraza que parece que tiene un tono, ¡una cuestión de gusto!

Pasé 3 noches en el hotel Leku Eder y quedé encantado. La habitación tenía unas vistas espectaculares hacia el mar, lo que hacía que cada mañana al despertar fuera un placer. La limpieza del lugar fue impecable. todo estaba ordenado y cuidado. El desayuno, preparado por la propietaria, fue un verdadero deleite, especialmente los bollos recién hechos. La atención del personal fue excepcional, siempre dispuestos a ayudar con recomendaciones de lugares para visitar y comer. La ubicación es ideal para quienes quieren estar cerca de San Sebastián, pero en un entorno más natural. Tienes una parada de autobús justo enfrente que te lleva al centro, lo cual es muy práctico. Sin embargo, noté que en la habitación no había neverita, lo cual podría ser útil para algunas bebidas. En general, una experiencia muy positiva y definitivamente estoy deseando volver.

Las vistas al mar son impresionantes y el acceso al autobús 16 facilita moverse a la ciudad. El personal excelente, siempre dispuesto a ayudar y dar buenos consejos. Unico, las almohadas un poco bajas.

El hotel se encuentra en una ubicación tranquila, con vistas espectaculares al mar desde la habitación. El desayuno es abundante y los bizcochos caseros son un verdadero placer. Sin embargo, las almohadas tienen un olor desagradable y no había neverita en la habitación, lo que podría mejorarse.